.jpg)
El próximo lunes 2 de agosto es el día de Nuestra Señora de los Ángeles en Cartago, patrona de Costa Rica. Los Ticos profesan una gran devoción a "La Negrita", y desde el día 25 de Julio comienza en todo el país una gran peregrinación para ir a visitar a la virgen.
La historia de esta imagen data del siglo XVII, se cree que en 1639, cuando una muchacha indígena (se desconoce el nombre real, pero se la denominó "Juana Pereira" nombre común en las indígenas de la zona en esa época) encontró la talla en el lugar donde se encuentra ahora la basílica. Se la llevó a su casa en varias ocasiones, pero siempre desaparecía y volvía a aparecer en el mismo lugar, incluso cuando la mulata le llevó la imagen al párroco y éste la guardó en el sagrario, la virgen siempre desaparecía para aparecer en la misma piedra. Pensaron entonces que la virgen quería habitar en ese lugar, y se le construyó allí mismo primero una ermita, y posteriormente la basílica en 1675, gracias a las aportaciones de los vecinos, en su mayoría propietarios de fincas de cacao. La basílica original se vio muy dañada con el terremoto que afectó al país en 1910, momento en el que se reemplazó por una de mayores dimensiones que es la que se puede visitar actualmente.
La romería es un acto que aglutina a algo mas del 50% de la población costarricense, llegando a pasar por la explanada de la Basílica 2 millones y medio de personas en una semana.
El grueso de la peregrinación acude desde San José, pero acuden personas de todo el país. Especialmente impactante es la peregrinación que parte desde Coto Brus, a unos 200 km, y superando el "Cerro de la Muerte" con más de 3.500 metros de altitud.
Si bien la mayoría de peregrinos son locales, ya sean Ticos (la mayoría) o Nicaragüenses, los turistas devotos son bien recibidos.
Hay que tener en cuenta que el camino, aunque se realice desde San José, es bastante duro. La mayoría de peregrinos realizan el regreso en taxis "colectivos" (compartidos) o en autobús. Conviene llevar un calzado cómodo, mucha agua y un poncho o capa de agua, ya que la romería se realiza en temporada de lluvias. Ante cualquier problema se puede acudir a alguno de los numerosos puestos de control que la Cruz Roja Costarricense ubica por todo el recorrido.
Como curiosidad el año pasado se suspendió la romería por prevención ante los casos de gripe H1N1, siendo esta la primera vez que se cancelaba en 227 años.
Y como novedad este año la entidad bancaria Bancrédito publicará y distribuirá tanto en sus oficinas como en parroquias de todo el país una guía del peregrino con información sobre la romería, la Basílica, la Virgen, etc.
Una forma de ver una Costa Rica diferente, y de acercarse a una de sus tradiciones más arraigadas.
La historia de esta imagen data del siglo XVII, se cree que en 1639, cuando una muchacha indígena (se desconoce el nombre real, pero se la denominó "Juana Pereira" nombre común en las indígenas de la zona en esa época) encontró la talla en el lugar donde se encuentra ahora la basílica. Se la llevó a su casa en varias ocasiones, pero siempre desaparecía y volvía a aparecer en el mismo lugar, incluso cuando la mulata le llevó la imagen al párroco y éste la guardó en el sagrario, la virgen siempre desaparecía para aparecer en la misma piedra. Pensaron entonces que la virgen quería habitar en ese lugar, y se le construyó allí mismo primero una ermita, y posteriormente la basílica en 1675, gracias a las aportaciones de los vecinos, en su mayoría propietarios de fincas de cacao. La basílica original se vio muy dañada con el terremoto que afectó al país en 1910, momento en el que se reemplazó por una de mayores dimensiones que es la que se puede visitar actualmente.
La romería es un acto que aglutina a algo mas del 50% de la población costarricense, llegando a pasar por la explanada de la Basílica 2 millones y medio de personas en una semana.
El grueso de la peregrinación acude desde San José, pero acuden personas de todo el país. Especialmente impactante es la peregrinación que parte desde Coto Brus, a unos 200 km, y superando el "Cerro de la Muerte" con más de 3.500 metros de altitud.
Si bien la mayoría de peregrinos son locales, ya sean Ticos (la mayoría) o Nicaragüenses, los turistas devotos son bien recibidos.
Hay que tener en cuenta que el camino, aunque se realice desde San José, es bastante duro. La mayoría de peregrinos realizan el regreso en taxis "colectivos" (compartidos) o en autobús. Conviene llevar un calzado cómodo, mucha agua y un poncho o capa de agua, ya que la romería se realiza en temporada de lluvias. Ante cualquier problema se puede acudir a alguno de los numerosos puestos de control que la Cruz Roja Costarricense ubica por todo el recorrido.
Como curiosidad el año pasado se suspendió la romería por prevención ante los casos de gripe H1N1, siendo esta la primera vez que se cancelaba en 227 años.
Y como novedad este año la entidad bancaria Bancrédito publicará y distribuirá tanto en sus oficinas como en parroquias de todo el país una guía del peregrino con información sobre la romería, la Basílica, la Virgen, etc.
Una forma de ver una Costa Rica diferente, y de acercarse a una de sus tradiciones más arraigadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario